Benito Pérez Galdós ‘Miau’
Benito Pérez Galdós es quizás el escritor español moderno por antonomasia, que ha trascendido los siglos XIX y XX y lo que llevamos dell XXI con una frescura que supera la mirada histórica a su obra. Otros autores de su época y posteriores alumbraron sus obras con mayores artificios y quizás con un espíritu más vanguardista, pero el estilo, los contenidos, la mirada de Pérez Galdos permanece desde su realismo crítico, despojado de ornamentos, pero certero. Sin olvidar su magna capacidad de trabajo, que le posibilitó trazar un rico fresco de la España que le tocó vivir.
176 años después de su nacimiento, su obra sigue estando vigente, como ‘Miau’, publicada en 1888, y que se presenta como una sátira implacable del Madrid burocrático de la época, perfectamente trasladable a estos tiempos en los que vivimos, en la que se narra la progresiva caída de Villaamil, arquetipo del cesante, son anudados con mano maestra y desembocan en un final esperpéntico, a la vez trágico y caricaturesco.
En ‘Miau’, Galdós quiere vincular y vincula la ficción de la novela a la realidad histórica de los dos momentos en que el relato transcurre y en que la novela se escribe, la España de la Restauración en dos etapas y situaciones muy diferentes: la romántica y llena de esperanzas de una España Moderna, recién casado Alfonso XII con su prima María de las Mercedes, y la de la desesperación general, en un mundo cerrado en sí mismo con los turnos en el gobierno de Cánovas y Sagasta, que se produce a la muerte del rey. La novela es, como Galdós quería, un trozo de España. A la burocracia, la Administración Pública, al Estado, los gobiernos, las influencias, los manejos de oficinas y funcionarios dedicó Galdós esta novela, centrando la historia en el asunto del complicado proceso de desgaste psicológico al que se ve sometiendo su protagonista al perder su trabajo.
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